Impecable

 

Tomás Etcheverry, impactante en Roland Garros: derrotó a Alex De Miñaur y avanzó por primera vez a la tercera ronda de un Grand Slam 

 

El platense de 23 años venció al 18° preclasificado luciendo un juego osado y ofensivo.

 

 

Tomás Etcheverry venció a Alex De Minaur y avanzó a la tercera ronda de Roland GarrosJulian Finney - Getty Images Europe

 

PARÍS (Enviado especial).- Lejos de conformarse, el platense Tomás Etcheverry sigue alimentando el mejor año de su vida tenístico. El jugador de 23 años y 49° del ranking avanzó por primera vez a la tercera ronda de un Grand Slam. En el coqueto y poblado court 14 de Roland Garros, derrotó a un rival de alta jerarquía como el australiano Alex De Miñaur (18° preclasificado) por 6-3, 7-6 (7-2) y 6-3, en 2h45.

Etcheverry, de 1,96m, volvió a lucirse con un juego ofensivo basado en poderosos tiros y un servicio que fluctúa entre las ejecuciones con potencia y pimienta. Al argentino no le pesó tener a un rival de alta categoría, una suerte de David Ferrer en miniatura (por su capacidad para desplazarse y defenderse ante tiros que parecen imposibles de devolver). Al contrario: encaró el duelo ante el exnúmero 15 del mundo con mucha personalidad, envalentonado por su estado de ánimo.

 

Etcheverry, hincha de Gimnasia y Esgrima La Plata, empezó liderando un gran impulso albiceleste en una jornada intensa, con presencia de seis jugadores de nuestro país compitiendo en la terre batue de París. Jugó con la certeza de saber con los buenos recursos que ostenta y que este año, por ejemplo, lo llevaron a jugar dos finales en el circuito ATP, ambas sobre polvo de ladrillo: en Santiago de Chile (perdió con el local Nicolás Jarry) y en Houston (cayó ante el estadounidense Frances Tiafoe).

Ante De Miñaur, Etcheverry anotó tres aces, cometió tres doble faltas, logró el 62% de primeros servicios, ganó el 75% de puntos con el primer saque y el 64% con el segundo. Llegó a sacar a 218km/h y ganó cuatro de las ocho chances de quiere que le generó al oceánico hijo de una española y de un uruguayo. Tommy logró 24 tiros ganadores y cometió 30 errores no forzados.

“Fue un partido perfecto. Dudé nada más que en el primer game del partido. Me costó el saque al principio. Pero después de acomodé, pegué muy bien la derecha, el saque estuvo sólido, el revés también. De principio a fin me sentí muy cómodo. En el segundo set saqué 6-5, no lo pude cerrar, pero jugué un tie-break espectacular y ahí me dio alivio. Pasé rápido la página, seguí enfocado. El otro iba a tener que ganarme tres sets seguidos y yo iba a seguir a full, así que se le iba a hacer cuesta arriba”, expresó Etcheverry durante su rueda de prensa en una de las salas principales de Roland Garros.

El argentino logró, además, despojarse de los ingratos recuerdos que le generaba el rival, ya que De Miñaur siempre lo había vencido en los tiempos de juniors. “En estos días lo pensaba: ‘Este chico me ganó cinco veces y todas en polvo de ladrillo, mi superficie’. Pero pasaron siete años de la última vez y somos jugadores distintos. Desde el primer día que llegué a Roland Garros me sentó bien, estoy con confianza. Alex era mi ‘papá' de junior, por decirlo de alguna manera. Nunca le pude ganar. Es más: me acuerdo en un Grado 2 en Córdoba, que yo iba 6-1 y 4-0, pero lo perdí. Dije: ‘A este chico no le gano más’. Varios años después la historia cambió. Fue un partido impecable”.

Antes de llegar a esta ciudad, Etcheverry sólo contaba con una victoria en torneos de Grand Slam: en el Abierto de Australia, en enero pasado. Ahora ya sumó dos y va por más. El jugador entrenado por Walter Grinovero se aseguró un premio de 142.000 euros y un avance en el ranking, al menos, hasta el puesto 41°.

El próximo rival de Etcheverry será el croata Borna Coric (15° preclasificado), que venció al cordobés Pedro Cachin por 6-3, 4-6, 4-6, 6-3 y 6-4, en una larga batalla que duró 4h29m. Fue una gran actuación del cordobés, de 28 años, que estuvo cerca de vencer al número 16 del mundo.

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