martes, 9 de diciembre de 2014

En los barrios de Mar del Plata

En la búsqueda de una mejor convivencia para que haya menos delito y violencia

El programa Puntos de Encuentro funciona como uno de los principales dispositivos del municipio para mejorar la convivencia en barrios más conflictivos de la ciudad. Promueven la construcción de vínculos entre los vecinos para generar cambios que impacten en el delito y la violencia.

La Secretaría de Seguridad de la comuna planea intensificar su actuación en algunos de los barrios más conflictivos de la ciudad, ampliando de manera significativa las acciones orientadas a mejorar la convivencia entre vecinos que está implementando la dirección de Prevención de la Violencia y el Delito. En 2013 el programa Puntos de Encuentro se estableció como una de las principales herramientas de la Municipalidad para tratar de regenerar el tejido social en zonas con grandes carencias y conflictos. En sus orígenes, el primer logro de este programa fue el de inventariar la oferta cultural, sanitaria, educativa y social del municipio para hacerla más visible y asegurar que todas las propuestas existentes estuvieran más al alcance de la gente que más pudiera necesitarla.
Una vez conseguido ese objetivo, los Puntos de Encuentro hicieron explícita su intención de promover cambios positivos en los barrios, trabajando sobre las problemáticas de vecindad o la violencia juvenil y doméstica. A casi dos años de que la comuna comenzara con esta iniciativa ya se obtuvieron varios logros. En Belisario Roldán, por ejemplo, los vecinos están avanzando con su proyecto para construir un centro comunitario.
En Las Canteras trabajan los fines de semana para reacondicionar la sede de la sociedad de fomento. Miles de chicos y adultos participan de actividades recreativas, deportivas y de talleres de oficios y hasta de jornadas dedicadas a mejorar el aspecto y las condiciones de seguridad de sus vecindarios.
La titular de la Dirección de Prevención de la Violencia y el Delito, María Eva Ayala, le explicó a LA CAPITAL que el año próximo el programa incorporará nuevos ejes de trabajo orientados especialmente a los adolescentes y los jóvenes. Por ejemplo, ya está resuelto poner en práctica un proyecto para fomentar la incorporación de normas entre chicos que, por distintas razones, tienen dificultades para acatar reglas. A ellos se les ofrecerá participar de un programa de fútbol autorregulado, que no sólo les permita aprender a acordar y respetar pautas, sino también a vincularse con otros. Sumado a esto se pondrá en marcha un proyecto para rescatar lo mejor de cada barrio, identificando y apoyando aquellas cosas valiosas que hace la gente. "En un barrio hay un grupo de chicos que se reúne a bailar hip-hop a los que estamos poniendo en contacto con otro grupo similar de otro barrio para así crear relaciones que los incentiven", contó Ayala, asegurando que existen múltiples ejemplos de cosas que los vecinos hacen por sí mismos y que vale la pena rescatar.

Para una mayor seguridad
Según la funcionaria, no es casualidad que el programa Puntos de Encuentro esté bajo la órbita de la Secretaría de Seguridad, a cargo de Adrián Alveolite. "Para el equipo de trabajo del intendente Gustavo Pulti la salida de la inseguridad, en gran medida, pasa por construir una mejor convivencia a través de una tarea comunitaria", sostuvo. Este año el Programa ya funciona en 16 barrios de Mar del Plata y Batán, donde se registran problemáticas que se reflejan en los valores de algunos indicadores. En estos lugares es donde se presentan los más altos índices de violencia y delitos, las mayores cifras de desempleo, la más baja escolaridad y las mayores dificultades para el acceso a los servicios. "La idea es apoyar a la comunidad cada vez que desea mejorar algo de su propio espacio. Cuando se genera confianza la gente plantea su deseo de acceder a lugares y actividades y a querer desarrollar una identidad barrial positiva", dijo Ayala. Sin embargo, para alcanzar estos logros, a veces es necesario estimular a muchos que piensan en su barrio "como un lugar en el que sólo pueden suceder cosas malas", explicó.
De los 16 lugares en donde se desarrollan los Puntos de Encuentro, no todos presentan la misma realidad. "En algunos claramente surgen de inmediato los lideres positivos y en otros cuesta mucho más que la gente se involucre. Muchas veces lo que imposibilita esto es la reticencia de los vecinos a establecer en un vinculo, pensando únicamente en sus necesidades y no las del conjunto de la comunidad. Por eso hay procesos diferenciados según el barrio. Muchas veces encontramos lugares donde los proyectos ruedan solos y en otros es más complejo alcanzar objetivos porque todavía la gente no ve la posibilidad de construir algo en conjunto", sostuvo la funcionaria.
De momento los resultados se miden a través de historias personales o colectivas, protagonizadas por personas que, atraídas por alguna actividad, comienzan a compartir sus problemáticas o inquietudes: madres que se conocen y hablan sobre la crianza de sus hijos, chicos que construyen un vínculo de amistad u hombres que se ponen de acuerdo para limpiar un basural. "Un objetivo es promover la autogestión. Salimos de una lógica de la dependencia del Estado porque estamos ante personas que deben transitar por un proceso de empoderamiento para mejorar la convivencia", contó Ayala. A veces los Puntos de Encuentro son útiles para borrar las diferencias que existen entre un lado y otro de una calle, sobre todo en barrios donde existen fronteras invisibles que generan subculturas, entre por ejemplo, los que habitan un complejo habitacional y el resto del vecindario. El programa tiene como otro ingrediente una campaña de "buen trato y convivencia" para ayudar a la gente a reflexionar sobre cómo relacionarse con sus vecinos y a pensar si sus actitudes y formas de comunicarse son violentas. "A veces encontramos que hay desesperanza, apatía y falta de confianza en que los cambios se den mediante la construcción colectiva. Lo que tratamos de hacer de una manera sostenida es volver a crear el tejido social, repensar que cada uno no puede tirar para su lado y que hay un lugar común hacia donde ir", destacó Ayala.

http://www.lacapitalmdp.com

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