Champions Trophy
En Mendoza, el equipo de Santiago Capurro se impuso por 7-2 y se metió en las semifinales, donde enfrentará a Holanda. Luciana Aymar marcó un gol y fue ovacionada.
El abrazo de todas Las Leonas en uno de los goles ante China. (DyN).
Un festival de goles y muy buen hockey fueron Las Leonas en la noche mendocina. Con una Luciana Aymar inspiradísima, que derrochó magia por toda la cancha, y un equipo compacto que jugó en un altísimo nivel, las argentinas sellaron su pase a semifinales del Trofeo de Campeones de Mendoza al golear por 7-2 a China.
Sobre todo, Las Leonas jugaron un partido casi perfecto y dejaron en claro que son unas de las grandes candidatas a levantar el trofeo. Mañana se vendrá Holanda, el clásico rival, el más complicado. Pero Las Leonas están tranquilas. Saben que jugando como lo hicieron anoche, las chances de una victoria son muchas.
Si Argentina se llevó ayer un triunfo tan contundente ante el seleccionado asiático fue porque tuvo algo que en los partidos anteriores -por lo menos en los dos primeros- le faltó: efectividad.
Por un lado, en los córners, un arma que hasta hoy no les había rendido. Cinco de los siete goles llegaron por esa vía (tuvieron nueve cortos en total) y desde los palos de diferentes jugadoras: Noel Barrionuevo, Carla Rebecchi y la propia Aymar. Pero además aprovecharon los errores defensivos de las chinas y consiguieron sumar también a través de lindas jugadas colectivas.
Todas tuvieron un rendimiento muy alto y lograron poner en funcionamiento el sistema de juego que planteó Santiago Capurro. En las pocas jugadas de peligro que generó el conjunto asiático, el equipo completo estuvo listo para defender. Belén Succi y Laura Aladro, que entró en el último cuarto, respondieron con seguridad en el arco, Agustina Habif, Silvina D'Elía, Julia Gomes Fantasia y Barrionuevo dieron seguridad atrás y las volantes y delanteras aparecieron en varias ocasiones para dar una mano.
Y una vez recuperada la bocha, todo el equipo se lanzaba a atacar y generaba una presión casi constante de la mitad de cancha para arriba, liderado por Aymar. La rosarina vivió el partido con una gran intensidad. Pidió la pelota en todo momento, no dejó de correr y despertó la ovación del público con jugadas que sólo una "distinta" como ella puede hacer.La magia de Lucha, combinada con la frescura de Pilar Romang y Florencia Habif, el talento de Delfina Merino y Rocío Sánchez Moccia, y la experiencia de Rosario Luchetti y una imparable Carla Rebecchi -la gran figura del partido- fueron pesadillas para la defensa rival.
Una vez más, lo más flojo del equipo apareció en el tercer cuarto. Después del descanso de 10 minutos, las chicas ingresaron más relajadas y China aprovechó para adelantarse en la cancha y generar dos cortos. Pero la victoria de Argentina nunca peligró.
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