En un insólito final, Francisco Cerúndolo sorprende y elimina a Benoit Paire
El mayor de los hermanos sacó del torneo al tercer preclasificado, que no se bancó la derrota y entregó el partido de manera increíble. Al pibe no le importó y celebró una importante victoria por 4-6, 6-3 y 6-1.
Foto: @ARGENTINAOPEN
El tenista argentino Francisco Cerúndolo concretó hoy la mejor actuación de su carrera y se instaló en los cuartos de final del Argentina Open, el ATP 250 que se juega en el Buenos Aires Lawn Tennis Club, tras superar en un partido cambiante y de final insólito al francés Benoit Paire por 4-6, 6-3 y 6-1.
El argentino, de 21 años y surgido de la clasificación, había superado en la ronda inicial al Federico Coria (85) e intentará dar otro paso mañana ante Pablo Andújar (57), quien previamente eliminó a Gianluca Mager (101) por 6-4 y 7-6 (7-5). "Fran" prolongó el buen momento familiar que había iniciado su hermano menor Juan Manuel cuando conquistó el Córdoba Open.
Con el partido igualado en parciales, el argentino mantuvo la concentración y también la precisión con su derecha, así fue edificando una victoria que empezó a concretar cuando quebró dos veces a Paire, primero para 2-1 y luego para 4-1. Esos fueron los dos últimos puntos que jugó el francés, luego en una actitud totalmente antideportiva entregó los dos juegos siguientes.
Cerúndolo festejó con el puño cerrado, miró a la tribuna donde estaban sus padres y hermanos, y saludó con cordialidad a Paire, un tenista de 31 años que lo supera largamente en experiencia y que llegó a ser 18 del mundo en 2016.
Cerúndolo aseguró la presencia de un argentino entre los ocho mejores del torneo, aunque podría sumarse más tarde Diego Schwartzman (9), el máximo favorito al título que debutará directamente en los octavos de final ante el eslovaco Lukas Klein (291) en el partido que cerrará la jornada.
¿Por qué digo que Paire es un maleducado?
Cuando Cerúndolo servía 15-40 en el tercer game, discutió acaloradamente con el juez de silla por un fallo, escupió en la marca de la pelota en la cancha, se ganó los silbidos de todos y recibió una advertencia.
Poco después, con el argentino 3-1 arriba, volvió a escupir, revoleó dos botellas de agua y hasta tuvo un cruce de palabras con el supervisor del torneo. Así, fue penalizado con un punto.
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