Motoqueros

Después de la caravana callejera, las motos coparon la Rambla

El sonar de los motores de cientos y cientos de motos de distintas cilindradas llegó ayer hasta la rambla, después de recorrer en caravana las calles de la ciudad, en el marco del 4º Motoencuentro de Smata que culmina hoy.



Las motos coparon la Rambla.

Después de un almuerzo livianito en el camping de Smata, los participantes del evento abordaron sus máquinas y desde Luro al 10 mil llegaron hasta la costa, para tomar la calle Buenos Aires hasta la avenida Colón y otra vez hasta la costa, para retomar y estacionarse en la plazoleta Almirante Brown.
Allí se fueron estacionando las "máquinas" de mayor cilindrada al lado de las Gileras Smash y las Vespa, que llegaron identificadas con un cartel del club local que agrupa a las motonetas.
Al pie de la estatua al Almirante Brown, el escenario montado especialmente albergó a la banda Exiliado que, a pleno sol y bajo un cielo despejado, tocó temas propios y covers de bandas como Metallica o Motorhead.
Los pañuelos en la cabeza, pantalones de cuero, tatuajes en los brazos y botas conformaron el "look" mayoritario de los asistentes, aunque también quienes abandonaban la playa con sus sillitas en la mano se detuvieron a observar las distintas motos que convirtieron a la rambla en un estacionamiento a cielo abierto.
Hombres y mujeres, de todas las edades, algunos padres e hijos, parejas y el actor Alejandro Muller fueron parte del heterogéneo público que dieron forma al evento que fue el aperitivo para la noche de clausura.
Muller, uno de los integrantes de "Sé infiel y no mires con quien", consignó que "lo vi pasar y me sumé, quería participar, me gusta mucho", al ver al propietario de "un scooter grande y una Falcon".
Con botas de cuero negro con tachas y pantalón y chaleco al tono, María Angélica Invernati decidió festejar el Día de la Mujer a bordo de su Custom 150 porque "la moto es todo", señaló la "rider" que aprendió a manejar sobre dos ruedas a "los 7 años y nunca más bajé".
Graciela llegó como acompañante de su marido Juan, junto a su hija Macarena y Maximiliano, un amigo de la joven, todos a bordo de motocicletas. "Somos una familia motoquera", resumió la madre que aseguró haber concurrido a todos los encuentros de este tipo que se realizaron en la ciudad.
A la noche, ya en el camping de Smata, la fiesta continuó con fogones, la cantina, recitales a cargo de Sprint, Match Box, Blanck Angel y Peces de Mármol, amenizados por el show de strippers que comenzaron a despedir a los moteros hasta el año que viene y, en ese clima de fiesta, se sorteó una Motomel de 150 cc 0 kilómetro. Hoy será el cierre del evento.

http://www.lacapitalmdp.com