miércoles, 10 de febrero de 2016

Muy bueno lo de Pico

Mónaco disfruta su regreso: "Tuve miedo de no volver a jugar"

Después de seis meses sin jugar, derrotó por 6-1 y 6-3 al italiano Cecchinatto en el ATP de Buenos Aires; el jueves se enfrentará con Nadal.

Por José Luis Domínguez

Había disputado su último partido el 3 de agosto pasado, frente al holandés Robin Haase, por la primera rueda del ATP de Kitzbühel; dolorido por una lesión de larga data en la muñeca derecha, no lo pudo completar y su carrera entró en un paréntesis forzado tras una operación que le puso incertidumbre a su futuro. Pero Juan Mónaco volvió, y dio un primer paso exitoso en su regreso, al derrotar cómodamente al italiano Marco Cecchinatto por 6-1 y 6-3, en la primera rueda del Argentina Open.
Más allá de que el estreno oficial había sido el lunes, con una caída en dobles con el italiano Fabio Fognini como compañero, la primera prueba en singles fue el martes, en el court central ahora bautizado Guillermo Vilas. Frente a unos 2.000 espectadores, Mónaco redondeó una actuación convincente, más allá de que Cecchinatto -92° del ranking e ingresado desde la clasificación- estuvo lejos de ponerlo en aprietos.
Pero, para Mónaco, el examen fuerte llegará pronto: el jueves, seguramente por la noche, se encontrará frente a frente con su amigo Rafael Nadal, número 5 del mundo y primer favorito aquí, y con el que justamente protagonizó la final del año pasado. Será, en todo caso, una oportunidad para tratar de jugar con soltura, aun cuando el zurdo de Manacor sea el claro favorito para quedarse con el pase a los cuartos de final.
Campeón del ATP de Buenos Aires en 2007, Mónaco se mostró satisfecho con la producción en su regreso. "Después de tanto tiempo y de mucho esfuerzo pude volver, y lo mejor es haberlo hecho acá, en Buenos Aires. Pasé la prueba. Por suerte me sentí muy bien, la muñeca hace tiempo que ya no siento molestias y estoy muy contento por la evolución", contó Pico.
"Cuando me retiré de ese partido en Kitzbuhel tuve miedo de no volver a jugar. Por suerte no se notó la inactividad, me sentí listo para competir, ahora toca Nadal, que es lo más duro que te puede tocar en polvo de ladrillo, pero las cosas se dieron así", amplió el jugador de Tandil, que en marzo cumplirá 32 años.

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