En Parque Roca, cerró la serie ante Kazakhstán en el dobles gracias a la victoria de Chela y Schwank ante Korolev y Schukin por 6-3, 6-2 y 7-5.
La Argentina mal acostumbró al hincha a liquidar series en el Parque Roca con incuestionable contundencia -por la localía, por la superficie o por la debilidad de ciertos rivales como Kazakhstán- que parece hasta injusto no remarcar una nueva victoria -aunque absolutamente previsible- que garantiza el pase a las semifinales de la Copa Davis por séptima vez en los últimos diez años.
Juan Ignacio Chela y Eduardo Schwank cumplieron una prolija actuación en su segunda serie como pareja: no tuvieron problemas en vencer 6-3, 6-2 y 7-5 a Korolev y Schukin para sellar la serie por 3 a 0, dentro de los planes y para que Del Potro no tenga que volver a jugar mañana por los puntos.
El triunfo en la serie es más que un paso adelante: se trata de la ratificación del rumbo de una nación que, pese a los lógicos vaivenes de nivel de sus jugadores en 10 años o la renovación de camadas a lo largo de la década, continúa comandando la élite del tenis mundial, a pesar de aún no haber podido levantar la Ensaladera de Plata en toda su historia.
Un abonado a las semifinales. Entre todas las potencias, la Argentina (5a en el ranking ITF) es, por lejos, la que más veces accedió a semis en los últimos diez años: en siete ocasiones estuvo entre los cuatro mejores (2002, 2003, 2005, 2006, 2008, 2010 y 2011), con dos finales incluidas (Móscu, en 2006, y Mar del Plata, en 2008). Las potencias que le siguen en esta estadística son Estados Unidos (6°), con cinco (2002, 2004, 2006, 2007 y 2008) semis y un título (2007) y Rusia (7°), también con cinco (2002, 2005, 2006, 2007 y 2008), con dos trofeos (2002 y 2006).
El contraste es aún mayor con Francia y Australia, después de EE.UU (32), las dos naciones con más Ensaladeras. Los galos, con 9 conquistas, acumulan sólo tres accesos a semifinales y, hace dos años, debieron jugar el repechaje ante Holanda para permanecer en el Grupo Mundial. Los aussies, por su parte, alzaron en 28 oportunidades la Copa, pero en los últimos diez años apenas lograron dos semis y en 2007 perdió el Grupo Mundial y aún no pudo regresar.
Con estos antecedentes, la Argentina afrontará el próximo paso ante Serbia o Suecia, en el primer caso como visitante. El campeón defensor es favorito en su serie y asoma con un durísimo escollo. Como dijo Nalbandian en la conferencia que brindó, será imprescindible que él y Del Potro lleguen en plenitud física, en septiembre, tras el US Open. Qué pasará con Pico Mónaco es otra cuestión para analizar camino a Belgrado.
Lo mismo que el dobles: el capitán, Tito Vázquez, querría contar con un dobles seguro: hoy Chela y Schwank aprobaron su examen de principio a fin. Una dupla estable en el circuito durante los casi tres meses que restan para la próxima rueda será tan difícil de conformar como necesaria para fortalecer el punto del dobles como visitante.
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