lunes, 18 de febrero de 2013

El título 14

Del Potro: Con la autoridad de un campeón
Se coronó en Rotterdam al vencer por 7-6 y 6-3 al francés Julien Benneteau. Es el 14° título de ATP de su carrera.
Rotterdam, Holanda. Especial. - 18/02/13
Un ace desató el festejo de Juan Martín Del Potro en Holanda, donde el número 7 del ranking mundial se coronó campeón del ATP 500 de Rotterdam (1.267.875 de euros, cemento) al derrotar por 7-6 (2) y 6-3 al francés Julien Benneteau. El tandilense -segundo preclasificado del certamen- necesitó una hora y 37 minutos para sellar el triunfo, que le dio el primer título en este torneo y el 14° de su carrera. Y, quizás aún más importante, le permitió volver a la senda del triunfo, luego de un complicado arranque de temporada en Australia.


Luces para un ganador. Delpo, con el trofeo de Rotterdam en sus manos. Detrás (fuera de foco), lo aplaude Benneteau. El tandilense fue de menor a mayor e impuso su categoría. / PETER DEJONG, AP
Ante un rival que llegaba a la final muy motivado luego de eliminar en cuartos al suizo Roger Federer (1°) y en semis a su compatriota Gilles Simon (5°), Del Potro sabía que iba a tener que sacar lo mejor de su tenis para conseguir la victoria. Pero arrancó desconcentrado y en el primer set se mostró irregular.
Benneteau no dejó pasar la oportunidad y, con un quiebre en el segundo game -el primero que sufría Delpo en la semana- se puso rápidamente 2-0. La reacción del argentino no tardó en llegar. Con gran autoridad, se llevó cuatro games al hilo y dio vuelta el resultado, para ponerse 4-2. Del Potro parecía tener controlado el encuentro. Pero el francés aprovechó un momento de imprecisión del argentino, consiguió su segundo break y volvió a pasar al frente 6-5. Toda la presión cayó sobre el tandilense, quien debía sacar para llevar la definición al tie break. Y Delpo no defraudó. En el desempate, recuperó la memoria y cerró el parcial con un contundente 7-2.
Muy diferente fue la historia en el segundo set.
Las idas y vueltas de la manga inicial comenzaron a pasarle factura a Benneteau, que -visiblemente cansado- cometió muchos más errores y le cedió las riendas del partido a su rival.
Y ahí apareció la mejor versión de Del Potro.
Muy seguro con su servicio (en ese set ganó el 90% de los puntos que jugó con el primer saque), el argentino impuso su juego. En un abrir y cerrar de ojos, con un quiebre en el segundo game, Delpo se puso 3-0. El francés no bajó los brazos y siguió presionando. Pero el tandilense no estaba dispuesto a dejar escapar la victoria. Ni siquiera cuando, con el marcador 5-3 a su favor, se disponía a sacar para el partido y tuvo que pedir asistencia médica porque comenzó a sangrarle la nariz. Lo más rápido que pudo, regresó a la cancha y selló el resultado con un game de saque impresionante y con un ace, su 13° de la tarde.
“Me siento increíble. Estoy muy lejos de casa, pero me hicieron sentir muy a gusto”, expresó Del Potro con el trofeo en las manos, el primero que consiguió en el certamen holandés, luego de haber caído en la final del año pasado ante Federer, el 14° que levantó en su carrera y el primero de este 2013, en el que de a poco va encontrando su mejor nivel. Una nueva victoria, otro título y un impulso más para seguir trabajando con la mente fija en su principal meta: el número uno del mundo.

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