viernes, 31 de mayo de 2019

Un partido inolvidable

Roland Garros: la bomba de Del Potro, la reverencia y la ovación de pie tras un partidazo

Por José Luis Domínguez

PARIS - Atrás quedaron 3 horas y 46 minutos de drama. Una película en la que no faltó un momento de sufrimiento para el gran protagonista -Juan Martín del Potro-, abundaron algunos tramos discretos, y también un final bien emotivo, con el tandilense descargando un martillazo tras otro con su derecha, y el japonés Yoshihito Nishioka dispuesto a traer todo cuando estuviera a su alcance.
Por fin, Del Potro se recostó sobre el drive invertido y sacudió el bombazo cruzado de derecha al rincón, inalcanzable como siempre, inatajable para Nishioka o cualquier otro rival. Así se terminó un partido tremendo, casi al filo del anochecer en el estadio Simonne Mathieu.

Y entonces sí, hubo ovación de pie para los gladiadores. Delpo soltó un grito en el que descargó toda su furia, y lanzó un martillazo hacia abajo, como para hacer temblar el piso, pero sin llegar a impactarlo. Saludó a la jueza de silla y cruzó la cancha; ensayó una reverencia de estilo oriental ante Nishioka, que sonrió encantado con ese gesto, y lo abrazó. Todo, debajo de un largo rato de aplausos, por la victoria, y por ese gesto caballeresco del argentino.

La reverencia de Del Potro a su rival. 
La reverencia de Del Potro a su rival. Fuente: AFP

El tandilense arrojó sus dos muñequeras a la tribuna y se dejó caer en su silla, tomándose la cabeza, todavía sin dar crédito a todo lo que vivió en la tarde del jueves de Roland Garros. Por fin, después de mostrarse contrariado durante casi todo el partido, se permitió sonreír, con ganas. y devolvió los aplausos. Se puso de pie para despedir a Nishioka, que con el bolso en la espalda retribuyó la reverencia previa del argentino. Así se cerró la jornada en el Simonne Mathieu, con un final feliz, al menos para Del Potro.

https://www.lanacion.com.ar 

No hay comentarios:

Publicar un comentario